27 Jul. Mandalay. U Bein, Sagaing, Inwa y Amarapura
Excursión a U Bein, Sagaing, Inwa y Amarapura. Antiguas Capitales Reales
Hemos quedado con el conductor a las 8:30 nos levantamos una hora antes para poder desayunar tranquilamente y cuando salimos de la habitación vemos un reloj que marca las 7 de la mañana. Llegamos al comedor y otro reloj con media hora de adelanto… y como no…como va a ir mal mi reloj….. pero al final consiguen convencerme de que efectivamente la diferencia horaria no es de 6 horas sino de 5.30
Desayunamos con calma muy bien, y vamos a la entrada del hotel. Aparecerá nuestro conductor? Pues si!!! Ya está esperándonos.
Hemos contratado el transporte para todo el día visitando las U-Bein, Sagaing e Inwa, pero el conductor nos va ofreciendo alternativas de camino a Amarapura para ver el desayuno de los monjes a las 11 de la mañana y son la 8:30 decidimos ir aceptando alguna de sus sugerencias.
Primera parada para ver la fabricación del pan de oro que luego depositan en los budas. Nos impacta mucho ver como durante horas van aplastando con una maza el oro hasta dejar las finísimas láminas. Y la delicadeza con la que una de las chicas coloca los gramos exactos para formar cada lámina utilizando polvo de talco en sus dedos para que no se le peguen.
Segunda parada, taller de madera y bordados. Varias mujeres alrededor de una tela que bordan con infinita paciencia que terminaran siendo paños llenos de colorido y dorados. Entre la tallas de madera vemos algún rosetón que nos llevaríamos a casa pero la vedad es que nos queda demasiado viaje para tener que cargar con él, otras tallas no me las llevaría pero eso no quita para que no admire el trabajo que llevan. En la tienda también encontramos gran cantidad de marionetas, si alguno sois coleccionistas casi seguro que saldréis con una, a mí personalmente no me entusiasman.
Nos propone parar en el templo en el que se realiza el lavado de cara del buda, pero como tenemos intención de ir mañana por la mañana nos saltamos esa parada.
Monasterio de Mahagandhayon, desayuno de los Monjes
Siguiente parada Amarapura, el monasterio de Mahagandhayon para ver la entrada al desayuno de los monjes. Hemos llegado con bastante antelación y podemos dar una vuelta por la zona, nos explican que está organizado en zonas de comida, oración, estudio, dormitorios….
Llega la hora cada vez somos más turistas, la verdad es que tengo sentimientos encontrados respecto a esta visita, por una parte, es impresionante ver a todos los monjes con sus hábitos granates y su cuenco negro, cada vez que veo las fotos me parecen preciosas, y por otra la sensación de estar metiéndome en un acto privado. Intentamos ser respetuosos haciendo las fotos con el zoom y evitando situaciones como la de un turista alemán al que echaron la bronca por estar metiéndose entre la fila de monjes.
Puente de U-Bein
Terminada la visita al monasterio decidimos acercarnos al puente de U-Bein, lo más recomendable el ir a la hora de la puesta de sol, y creemos que antes del desayuno de los monjes suele ser visitado por los grupos organizados. Nosotros por suerte lo visitamos con mucha tranquilidad. En esta época del año el río está muy crecido y nos podemos hacer las fotos de los altos soportes que lo caracterizan. Avanzamos por sus tablones de madera de teca hasta llegar a poco más de la mitad, decidimos dar la vuelta ya que trataremos de volver para la puesta de sol.
Regresamos al aparcamiento del monasterio donde nos espera nuestro conductor un tanto preocupado, no pensábamos pasar tanto tiempo en el puente y le extrañaba que no hubiéramos vuelto al finalizar el desayuno.
Sagain
Ponemos rumbo a Sagain, se puede subir a pie por unas escaleras pero nosotros tomamos la versión fácil y nos acercamos con el coche hasta el templo, por desgracia se ha puesto a llover, y no lo digo porque haga mal tiempo sino porque durante la visita al templo de Sagain al salir y bajar unos escalones mi hermana se resbaló en los azulejos mojados y se dio un golpe fortísimo, por un par de centímetros no se dio en la cabeza con un escalón pero estuvo dolorida durante varios días. Pero a quién se le ocurre poner azulejos… con lo que escurren cuando están mojados. Después de este susto, nos acercamos a una de las terrazas desde la que se ve toda la colina salpicada de pagodas y templos. La verdad es que las vistas merecen mucho la pena.
La siguiente parada fue en un restaurante, éramos todos extranjeros y tenían muy adaptado a nuestras costumbres el lugar. En otras ocasiones intentamos evitar este tipo de restaurantes, pero el hambre había hecho acto de presencia y después de varios días tampoco hace mal una mesa con mantel.
Inwa
Con el estómago lleno continuamos con nuestra ruta hacia Inwa. Pasamos con la barca hasta la isla, cuando llegamos está todo embarrado, la única opción es alquilar una calesa pero como somos 5 debemos dividirnos en dos. Nuestra calesa arranca la primera, vamos mirando para atrás a ver si encuentro la que lleva a mis hermanas y Jesús pero no les veo. Llegamos a un cruce… seguimos sin verles, y como me temía ellos han tomado la otra dirección. Después de un buen rato conseguimos reencontrarnos y poder visitar los templos juntos. Mis hermanas han pasado un rato de los más divertido tirando de repertorio…. “Mi carro me lo robaron….”, “Doce cascabeles tiene mi caballo….”
Para finalizar el día regresamos al puente de U-Bein, esta vez lo cruzamos entero y al igual que nos pasó por la mañana se convierte en un paseo muy agradable, tranquilo disfrutando del momento.
Hace mala tarde y no vamos a tener un atardecer de foto… volvemos un poquito antes al hotel y cenamos de nuevo en el bar de al lado del hotel con nuestras cervezas que hemos cogido en el super.